Con más de 120 años de dedicación a la vanguardia en investigación sobre el cuidado de la piel y una búsqueda interminable para entender la piel en sus niveles más profundos, Helena Rubinstein tiene la ambición de desarrollar una experiencia única con Cellular Skin Science, que significa: eficacia en el cuidado de la piel a nivel celular. Desde la central de Helena Rubinstein nos descubren el potencial de las células vegetales nativas -utilizadas originalmente para la medicina- para la alta cosmética, así como su eficacia, beneficios y presencia en los ingredientes clave de sus formulaciones, además de desvelar en exclusiva una nueva colaboración.

Helena Rubinstein anuncia en exclusiva una nueva colaboración científica destinada a ampliar los límites del papel de las células vegetales autóctonas en los esfuerzos globales por la sostenibilidad. La contaminación en interiores es una preocupación mundial, ya que la calidad del aire interior suele ser hasta ocho veces peor que la calidad del aire exterior. Dado que aquí es donde pasamos -de media- entre el 80% y el 90% de nuestro tiempo, se plantea un importante problema de salud pública.

Helena Rubinstein lleva mucho tiempo colaborando con científicos de renombre y expertos y ahora presenta una asociación innovadora con el CNRS (Centro Nacional Francés de Investigaciones Científicas). El CNRS es una institución líder mundial que aborda los apremiantes retos de hoy y de mañana, empleando una investigación multidisciplinar y a largo plazo en beneficio de la sociedad.

Helena Rubinstein y el CNRS se embarcan en un programa de investigación académica de tres años para: identificar la capacidad de las células vegetales autóctonas para neutralizar los compuestos orgánicos volátiles, principales responsables de la contaminación del aire interior; definir los procesos de cultivo óptimos; y diseñar materiales adsorbentes basados en células vegetales nativas.

Este programa de investigación abarcará varios aspectos interdisciplinarios como el cultivo in vitro de células vegetales nativas y sus respuestas metabólicas al estrés ambiental; el desarrollo de materiales adsorbentes originales; y la determinación de las propiedades de absorción y degradación de contaminantes gaseosos por estos nuevos materiales de origen biológico. Este nuevo proyecto científico podría allanar el camino a nuevas aplicaciones del cultivo de células vegetales, que podrían integrarse en estrategias innovadoras de descontaminación.

Con esta nueva asociación académica, Helena Rubinstein amplía una vez más los límites de células vegetales autóctonas para lograr un impacto positivo en el medio ambiente. El programa de innovación de la marca encarna su compromiso inquebrantable con el lujo en el cuidado de la piel, inspirado en los descubrimientos y la investigación científica más avanzados.