Clarins se ha inspirado del poder del frío combinando lo mejor de la naturaleza y de la ciencia para crear Cryo-Flash Cream-Mask, una mascarilla vanguardista capaz de bajar la temperatura de la piel 4 grados para tensarla, alisarla, reafírmala y, en definitiva, rejuvenecerla como si se tratara de un “lifting”. 

Con “Innovation Cryo Starter Technology” Clarins pone de relieve un proceso natural de la piel llamado flash calcio. Se trata de una entrada rápida de calcio en las células. Cuando la piel está expuesta a bajas temperaturas se inicia el proceso flash calcio. Una especie de inyección de combustible que favorece la renovación celular, en concreto la de los queratinocitos. Con la edad, la presencia de calcio en las células se reduce, el proceso flash calcio natural es menos eficaz, la función barrera de la piel se ve alterada y se vuelve vulnerable, es decir más fina, deshidratada, menos firme. Aparecen los surcos y las arrugas. 

La “Cryo Starter Technology” de Clarins permite una asociación entre crio moléculas M.G.A. y un extracto de onagra bío “cryo like” de efecto frío. La crio molécula M.G.A. es un derivado de mentol puro que actúa como un estárter térmico provocando el proceso flash calcio en la piel. Su poderoso efecto refrescante activa la penetración del calcio en la célula y previene el envejecimiento, tersa y reafirma la piel de inmediato.

El extracto de onagra bío “cryo like” es un verdadero estárter biológico. Esta planta es capaz de resistir al frio extremo. Está dotada de una alta concentración de oenoteína, una molécula capaz de activar el flash calcio. Activa biológicamente la penetración de calcio en las células para prevenir el envejecimiento. También es capaz de potenciar la síntesis de colágeno I para reafirmar la piel y protegerla de los efectos nocivos debidos a los radicales libres. 

La textura de Cryo Flash de color azul verde se desliza como un hielo sobre la piel y brinda una sensación de frescor y de relajación. Cryo Flash baja 4 grados la temperatura de la piel y es dos veces más frío que un tratamiento de crioterapia, según indican desde Clarins.

Asimismo, desde la firma apuntan que "usando Cryo-Flash dos veces por semana, después de 28 días, se nota una disminución de las arrugas de un -22% y una mejora de la firmeza de la piel de un + 39%".

Cryo flash se aplica en capa espesa sobre todo el rostro y cuello evitando el contorno de los ojos. Se deja actuar 10 minutos y se retira con un disco de algodón impregnado de loción tónica. También se puede aclarar con agua.