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El uso de la inteligencia artificial se está generalizando en el sector del retail, aportando numerosas ventajas para las enseñas y las marcas que quieren ofrecer a sus consumidores una experiencia de compra cada vez más digital y autónoma.
Los consumidores se han convertido en expertos digitales y sus expectativas han evolucionado considerablemente: quieren encontrar en el punto de venta las mismas ventajas que ofrece la compra por internet como, por ejemplo, el acceso a la información, la autonomía, la oferta de productos y el ahorro de tiempo.
La tienda física siempre ha sido y seguirá siendo el canal de compra preferido por los consumidores y representa hoy en día el 80% de las ventas en el sector del retail. Sin embargo, el 75% de las decisiones de compra se toman en línea. Por esta razón, hoy en día los consumidores esperan una experiencia de compra en tienda fluida y sin fricciones, en la que el smartphone desempeña un papel fundamental. Pero para que las promociones y la información sobre los productos sean accesibles, los retailers deben comunicarse continuamente con sus clientes y ofrecerles servicios como la posibilidad de chatear con un asistente, pedir un producto o hacer una recogida en tienda, incluso antes de que lleguen al punto de venta.
Esta transformación de la experiencia de compra puede lograrse mediante la inteligencia artificial, cuya adopción en el sector minorista a nivel mundial pasará del 40% al 80% en los próximos 3 años, según un estudio de IBM Corporation.
Pero, ¿qué es la inteligencia artificial (IA)? La inteligencia artificial es la habilidad de una máquina de presentar las mismas capacidades que los seres humanos, como el razonamiento, el aprendizaje, la creatividad y la capacidad de planear. Vemos el uso de la IA, por ejemplo, en los asistentes de voz o las aplicaciones GPS, capaces de detectar en tiempo real el tráfico, o en aplicaciones como el ChatGPT, un sistema capaz de responder a cualquier cosa que se le pregunte y que se ha hecho famoso en las últimas semanas.
En los últimos años hemos visto cómo la IA se está imponiendo cada vez más en el mundo del comercio, transformando la interacción entre el cliente y la tienda, y en general, todo el proceso de compra. ShopFully, la empresa propietaria de Tiendeo y compañía tecnológica líder en Drive to Store que conecta a millones de consumidores en línea con las tiendas de su entorno, analiza el impacto de la inteligencia artificial en las 4 P's del marketing mix y sus oportunidades para el sector del retail.
La inteligencia artificial permite analizar grandes cantidades de datos sobre los clientes y sus preferencias, y la evolución de las ventas de los distintos productos. Esto permite a los retailers y las marcas identificar tendencias y predecir cambios en la demanda de los consumidores de forma fiable.
La IA también ofrece la posibilidad de gestionar de forma inteligente la cadena de suministro, controlando la disponibilidad de los productos y optimizando la colocación de estos. Gracias a la inteligencia artificial, los retailers pueden, por ejemplo, comprobar en tiempo real si los productos están disponibles y bien etiquetados, si están colocados en el lugar correcto, o si la fruta y verdura está dañada, minimizando así los costes asociados con la sobrecompra o la falta de stock.
Por otra parte, la IA puede ayudar a las empresas a fijar precios más precisos y dinámicos, que cambian según los datos de la demanda, la competencia y las tendencias del mercado. Además, con el uso de las estanterías inteligentes, se puede identificar cualquier error de precio de un producto para que el personal de tienda pueda modificarlo.
La inteligencia artificial está transformando la forma en la que los consumidores compran productos en tienda, eliminando las barreras entre el canal físico y el digital. En los últimos años hemos visto, por ejemplo, el nacimiento de las tiendas sin cajeros gracias al reconocimiento inteligente de productos y a la facturación automatizada.
La tecnología de reconocimiento de voz, los chatbots y las pantallas interactivas son otros ejemplos de cómo la IA trata de replicar los puntos fuertes de la experiencia en línea a la que está acostumbrado el consumidor, mejorando la experiencia del cliente en el punto de venta.
Las promociones también son un ámbito donde la IA ofrece grandes beneficios a las enseñas, permitiéndoles personalizar el contenido mostrado al cliente y optimizar sus campañas de marketing.
Por ejemplo, la publicidad programática utiliza la IA para analizar el historial de compra, el comportamiento de los clientes y sus preferencias a partir de todos los datos disponibles para, a continuación, sugerirles un artículo u oferta concreta en el momento más adecuado y en la tienda más cercana al cliente. De este modo, el gasto en publicidad es más eficaz y aumenta la fidelidad de los clientes.
“La personalización desempeña hoy en día un papel muy importante. Crear anuncios específicos que se dirijan a un público objetivo concreto genera mejores resultados, pero no sólo hay que diseñar bien los contenidos: también hay que asegurarse de que los anuncios lleguen en el momento y el lugar adecuado para atraer a la audiencia en un panorama digital sobresaturado. Esto es lo que hace ShopFully, que permite a marcas y retailers aprovechar el potencial de la inteligencia artificial digitalizando sus ofertas y promociones para impactar a su público ideal en el digital y atraerlo a las tiendas más cercanas. Esta comunicación geopersonalizada a lo largo del recorrido de compra permite una experiencia omnicanal óptima”, explica Lila Coghen, Country Manager Iberia en ShopFully.
En resumen, la IA está transformando la forma en que las empresas abordan las 4 P's del marketing y les está permitiendo tomar decisiones basadas en datos y personalizadas que mejoran sus resultados. Ahora, depende de las marcas y retailers encontrar su lugar en esta tecnología y explorar todo su potencial.