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Los sectores turístico y minorista prevén un verano de récord en España en cuanto a afluencia de visitantes y a consumo. Según Exceltur, el turismo crecerá un 3,8% en 2016, acumulando así diez trimestres consecutivos superando el 3% de expansión. Sin embargo, la oportunidad de hacer agosto para las tiendas españolas se ve mermada por el repunte del hurto en estas fechas que son, según el Barómetro Mundial del Hurto de Checkpoint Systems, la segunda época del año preferida por los hurtadores, por detrás de la Navidad.
España cerró 2015 con 68,1 millones de turistas extranjeros, la mayor cifra de la historia del país y que supera en un 4,9% la del año anterior. Según la Encuesta de Gasto Turístico del INE, éstos gastaron 67.385 millones de euros el año pasado (+6,8%), siendo Canarias, Cataluña y Andalucía los destinos preferidos por los extranjeros. Los turistas representan, por lo tanto, un activo económico de primer nivel para las cadenas minoristas.
Sin embargo, el verano es también una época del año perfecta para los hurtadores, profesionales o no. Tal y como indica David Pérez del Pino, director general de Checkpoint Systems en España y Portugal, “las rebajas provocan un constante movimiento de mercancías y personas, y las vacaciones refuerzan más esta dinámica. Es fácil caer en descuidos si la tienda no está perfectamente equipada y con una plantilla preparada para utilizar las soluciones antihurto”.
El 18% del hurto en tiendas está cometido por los propios empleados, según el Barómetro Mundial del Hurto de Checkpoint Systems. Además, los errores administrativos provocan el 25% de pérdida desconocida. Esta tendencia se agudiza en las grandes campañas de verano e invierno a causa del mayor porcentaje de trabajadores temporales y con menos formación en los procesos internos de la tienda. En este sentido, Checkpoint Systems recomienda a los retailers reforzar la formación de la plantilla temporal y facilitar su interacción con los sistemas antihurto que conviven en el establecimiento.
En las zonas turísticas, gafas de sol, vinos y licores, cremas y protectores solares son los productos más codiciados por los hurtadores. Para protegerlos, los retailers utilizan etiquetas antihurto adaptadas a cada tipo de producto y soluciones Alpha como cajas de policarbonato o collarines de botellas, que están diseñadas específicamente para los productos con más riesgo de hurto.