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El valor del mercado de formación para empresas alcanzó la cifra de 2.150 millones de euros en 2023, un 7,5% por encima de la alcanzada en 2022, año en el que había crecido un 11,1%. Así lo refleja el Informe Especial “Formación para Empresas” publicado recientemente por el Observatorio Sectorial DBK de Informa (filial de Cesce), según el cual esta evolución estuvo motivada por el crecimiento de la demanda, en un contexto de positiva coyuntura económica y de aumento de la capacidad de inversión empresarial.
Por tipo de operador, las consultoras y empresas de formación especializadas facturaron 1.950 millones de euros en el sector de formación para empresas, un 7,4% más que en 2022, suponiendo cerca del 91% del mercado total. Por su parte, las escuelas de negocios y universidades experimentaron un crecimiento del 8,1% en 2023, hasta alcanzar unos ingresos de 200 millones de euros, es decir, en torno al 9% del total.
La actividad de las empresas del sector se ha visto impulsada por el buen comportamiento de la demanda y el desarrollo de la oferta
En cuanto a las modalidades de impartición, a lo largo del bienio 2022-2023 la modalidad presencial recuperó parte de la actividad perdida en los ejercicios previos como consecuencia del impacto de la pandemia, si bien su participación sobre el negocio total fue inferior a la contabilizada en 2019, ante el cambio de modelo en el ámbito de la formación.
De esta forma, la modalidad presencial acaparaba en 2023 cerca del 52% de la facturación total, seguido de la modalidad no presencial (34,7%) y semipresencial (13,7%).
A finales de 2023 se contabilizaba un total de 2.570 entidades con actividad de formación para empresas, cifra que ha registrado una tendencia al alza en los últimos años como consecuencia del buen comportamiento de la demanda. La mayor parte de los operadores son consultoras y empresas de formación especializadas, suponiendo en torno al 95% del total, correspondiendo el 5% restante a escuelas de negocios y universidades.
En los últimos años se ha registrado la entrada de nuevos inversores en el sector, lo que ha dado lugar a la configuración de algunos grupos de cierto tamaño, permitiendo un progresivo avance en el proceso de concentración de la oferta. En todo caso, la estructura de la oferta continúa presentando una fuerte atomización. De esta forma, los cinco primeros operadores reunieron en 2023 solo el 6,1% del valor total del mercado, participación que situó en el 8,8% al considerar a los diez primeros.